Encuentro la belleza en el conjunto de un rostro, en miradas y sonrisas, en pieles de porcelana. En adornos impensables y en colores irreales. Rostros que llenan una imagen y hablan por sí mismos.
Encuentro la belleza en el conjunto de un rostro, en miradas y sonrisas, en pieles de porcelana. En adornos impensables y en colores irreales. Rostros que llenan una imagen y hablan por sí mismos.